Las arquetas a medida ofrecen una amplia gama de ventajas, entre las cuales destacamos las siguientes: no transmiten olores, sabores ni colores, lo que las hace ideales para diversos usos. Además, son de fácil limpieza y ofrecen durabilidad y bajo mantenimiento. Su impresionante resistencia tanto química como mecánica garantiza un rendimiento excepcional, y en caso de rotura mecánica, su facilidad de reparación es un atributo valioso. Estas arquetas son sólidas, ligeras y fáciles de transportar. La flexibilidad de su composición les permite contener una amplia variedad de líquidos, desde agua potable hasta productos químicos, abonos, aceites, alimentos, bebidas, y mucho más, lo que las convierte en soluciones adaptables a diversas necesidades y aplicaciones.